Dentro de las charlas organizadas por Ja! Bilbao había una, la primera, en la que participaba Darío Adanti. El objetivo de la misma era lanzar una serie de recomendaciones de libros para leer durante un futuro confinamiento. Tras el acto, se celebró una sesión de firmas. Yo le llevaba un ejemplar de Disparen al Humorista. Como estuve escuchando la charla en la última fila del teatro (la que me correspondió) terminé primero en la cola de las dedicatorias. El autor tuvo un pequeño problema nada más iniciarlas. Su rotulador se había gastado. Afortunadamente, una persona del público llevaba un bolígrafo y pudo continuar con su labor. Os dejo el vídeo con la ejecución del sketch. Lástima de mamparas que tenemos que soportar delante por el dichoso coronavirus y que dificultan mucho la grabación.
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