analíticas

miércoles, 31 de octubre de 2018

Sketch de Wahcommo, por Luis NCT

Por fin, llegó la Tarde del Viernes. Momento en el que arrancan realmente las citas del Salón del Cómic de Getxo. No me cansaré de decir que me gustaría que no fuera así; pero lamentablemente la realidad es la que es. Los Viernes por la Mañana se tiran a la basura. A lo que iba, la convocatoria más importante era sobre las siete de la tarde. En la Sala de Cultura de Romo firmaban Javier Pulido, Javier Rodríguez y Natacha Bustos. Fuimos temprano a la puerta y aguardamos al reparto de tickets. Había ciertas dudas sobre la mecánica dado que este año la ubicación había cambiado con respecto a ediciones anteriores. Cuando salió el encargado nos explicó que solo entregaban un ticket por persona. Ninguno más. Y que cuando este hubiera conseguido la firma que le interesaba podría ponerse en otra cola si es que tenía tiempo. La mecánica nos pareció más que correcta y la aceptamos todos de buen grado. Yo elegí a Javier Pulido. Me dieron un número relativamente bajo. Estaba contento. Como la sesión no comenzaba hasta hora y media más tarde regresé a la carpa. En cuarenta y cinco minutos iba a comenzar allí otra. La de Wahcommo de Luis NCT. Dado que me intereresaba también y no podía dedicarle mucho tiempo me coloqué el primero en la cola. A la persona que estaba en el puesto de Astiberri le sorprendió lo temprano que acudí y me dijo que me diera una vuelta. Que me reservaba el sitio. Seguí su consejo y caminé entre los stands. Lo cierto es que ya los tenía muy vistos de la mañana y no mucho más tarde regresé al lugar de la cola. Para entonces ya había gente esperando. Rápidamente me coloqué el primero para evitar problemas. El vendedor me confesó que se había angustiado un poco porque según me marché había comenzado a llegar gente. Algo que no se esperaba. No pasó nada. Todo el mundo lo aceptó sin problemas. Puntual, llego Luis al stand. Le pasé mi libro y comenzó a dibujar un pequeño troll. Después comenzó a pintarlo con acuarela. Un disfrute poder verlo en primera fila. Salí de la fila con mi dibujo muy contento. Aunque era pequeño estaba muy bien. Sin embargo, a partir de ese instante comenzó a hacer sketches mucho más grandes. Os confesaré que el tercer día incluso le vi dibujar dos personajes en la dedicatoria. Al parecer, era el primer libro que dedicaba y no controlaba bien el tipo de papel. Por eso, mi sketch lo realizó con algo de miedo y no se soltó del todo. Una lástima para mí pero totalmente entendible. Unas veces se gana y otras se pierde que diría aquel. Bueno...en estas cosas no hay que ser tan negativo. Siempre se sale ganando aunque el premio por ser el primero no fue el mejor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario