En Diciembre, coincidiendo con la temporada de compras de regalos de la Navidad, se celebra en Durango, cerca de Bilbao, una feria en la que se venden libros y discos en euskera. Se trata de la Durangoko Azoka. De esta forma se trata de revitalizar el idioma. Tiene un gran éxito y se llena de una forma hasta agobiante de visitantes. Normalmente los vendedores también llevan ejemplares en castellano para quienes no controlan el idioma. Aunque esos no los suelen tener expuestos. Hay que pedirlos. Yo iba buscando en concreto un cómic de Sanvi. A esa hora tenía sesión de firmas. Sin embargo, cuando llegué a su stand allí no había nadie. Pregunté por él y me comentaron que podía acudir por la tarde. Que después de comer estaría de vuelta en el puesto. El problema es que yo solo iba a estar en la Azoka ese par de horas. Tuve que desistir en mi intento de conseguir su cómic firmado. Resulta que en mi paseo por los stands sí que había visto a Susanna Martín firmando su último trabajo realizado junto a Fermín Muguruza, Ainhoa Black is Beltza. La artista seguía en el mismo. En ese instante estaba tranquila así que pedí un ejemplar del cómic en castellano y me lo dedicó con este sketch. Lo curioso del caso es que, de pronto, de la nada apareció Fermín Muguruza y también me lo dedicó. En ese momento me dio por mirar atrás y me encontré una gigantesca cola de gente esperando. Entiendo que aguardaban a este artista. Os juro que no la había visto antes. Fui el último en llegar y el primero en llevarme la firma. Francamente, no entiendo muy bien qué pasó.
