Ilustración de Batman, por Larry Stroman

Como me dijeron el otro día, Bien está lo que bien acaba. Pero cuantos sinsabores podríamos habernos ahorrado. Hace once Meses compré esta ilustración de Batman a Larry Stroman. La verdad es que salió muy bien de precio. La compra la hice directamente al autor que en todo momento se mostró receptivo a través de mensajes privados de una red social. Sin embargo, una vez pagado el original es como si se quedara mudo de pronto. Yo esperé pacientemente. Aunque pasados cuatro o cinco meses le escribí para conocer la situación de mi pedido. Como digo, silencio absoluto. Ni tan siquiera habría los mensajes. Extrañado, decidí probar a través de otra red social en la que tengo otro nombre. No sabéis cual fue mi sorpresa cuando comprobé que ahí sí abrió el mensaje inmediatamente pero sin llegar a contestarlo. Mi mosqueo fue tal que decidí lanzarme a degüello. Directamente escribí unas líneas bajo la ilustración que había comprado contando mi experiencia. Ni que decir tiene que fue borrado a los pocos minutos por el artista y que me bloqueó. Yo no desistí y escribí un post aquí poniéndolo verde. Por supuesto, di por perdido el dinero y el dibujo. No sabéis cuál fue mi sorpresa cuando unos cinco o seis Meses más tarde me escriben de 4ccomics a una red social y me preguntan si estoy esperando algún envío de Larry. Les contesto afirmativamente. Ellos me dicen que el autor está sobrepasado con el tema de la paquetería y que le van a echar un cable. Rápidamente les paso mi dirección. Un Mes más tarde, ya tengo mi Batman en mis manos. Increíble. Me hace mucha ilusión tener un trabajo de Larry Stroman. Tenía muchas ganas. Lástima haber tenido que pasar por esta odisea. Por si fuera poco sigo bloqueado, claro. Cosa que por otro lado me importa un bledo. Como si fuera a repetir...El otro post lo he borrado.

Sketch de sketchbook Vol. 6, por Karl Kopinski

Tardé algo más de lo habitual en enterarme de que Karl Kopinski había sacado un nuevo Sketchbook. El sexto ya. Yo tengo todos ellos y este no me lo quise perder. Lo compré inmediatamente. La verdad es que en esta ocasión no vi ninguna casilla en la que poder apuntar alguna sugerencia. Terminado el pedido traté de escribir al artista por varios medios para hacerle una petición. Aunque tengo serias dudas de que le llegara alguna de ellas. Cuando llegó a casa el libro, lo primero que hice fue comprobar qué sketch había dibujado. Me llevé una pequeña decepción al comprobar que no era el personaje que yo quería; pero, por otro lado, quedé muy satisfecho al ver lo bonito que era el dibujo. Un soldado del Siglo XIX. Con esos grandes cascos. Casi listo para meter una bola de pólvora en el cañón. Está absolutamente genial. Me encanta.

Otro sketch de Victorie City, por Vincent Nappi

Pero es que la cosa no acaba ahí. Cuando ya estaba más que contento, cojo el cómic Victorie City, lo abro y en su primera página me encuentro este pedazo de sketch de uno de los personajes de la historia. Un detective duro con un aspecto que me recuerda al actor Steve McQueen. No me lo puedo creer. El garabato del que hablaba en la nota Vincent se ha convertido en dos supersketches. Pocas veces uno se lleva una alegría tan grande.

Victorie City sketch, por Vincent Nappi

Vincent Nappi es un ilustrador al que admiro muchísimo. No en vano, el dibujo por el que más he pagado lleva su firma. Este artista se dedica, sobre todo, a la ilustración de moda; pero, en ocasiones, también hace alguna incursión en el mundo del cómic. Una de ellas lleva por título Victorie City. Resulta que el autor encontró recientemente en su casa varias copias de este trabajo olvidadas en algún armario. Decidió sacarlas a la venta. Anunció que las mandaría firmadas incluyendo un doodle, un garabato. Uno nunca sabe qué significa este concepto. Dado que la firma es un garabato. Sea como fuere, dada mi admiración, decidí lanzarme. El paquete ha tardado un poquito en llegar. No por culpa de Vincent. Más bien ha sido por la ruta que ha seguido. Con parada en Irlanda incluida. De hecho, ha pasado allí retenido unos cuantos días. Pero, afortunadamente, ya está en casa. Cuando lo abrí encontré el cómic y este fantástico sketch de una sensual mujer realizado en una hoja a parte. Fabuloso. Sin duda, mi apuesta había sido todo un éxito. Gracias, Vincent.

Sketch de Azul y Pálido, por Pablo Ríos

Hace ya unos cuantos días me apunté a una oferta de la Librería Universal. Daban la opción de conseguir el cómic Azul y Pálido de Pablo Ríos dedicado. Este es un trabajo que en un principio no tenía pensado comprar. Sin embargo, me gustó tanto la portada que me animé a adquirirlo. Estuve esperando pacientemente y el tomo no acababa de llegar. Por redes sociales había visto que a otras personas les había llegado hace tiempo. Al final, comencé a preocuparme y escribí al comercio. Realmente no recibí contestación. Lo que recibí fue un aviso de una empresa de mensajería de que se lo habían entregado y que en unos días lo llevarían a mi casa. Supongo que se habría quedado olvidado o extraviado en la librería o algo. Menos mal que les escribí. Del sketch me ha sorprendido que es exactamente igual que otro que ya tengo del autor en cuanto a su filosofía. Un personaje saliendo de un agujero. En este caso, un hombre de negro.

Sketch de Un Fantasma, por Arnau Sanz

El otro cómic que encontré firmado fue Un Fantasma, de Arnau Sanz. Confieso que no conocía ni a Enrique Bonet ni a Arnau; pero me pareció una oportunidad tan buena que no quise desperdiciarla. Además tenía allí todos los tomos firmados esperando a que eligiera uno de ellos. Pocas veces puede uno escoger el sketch. La verdad es que los de Arnau me parecieron magníficos todos. Me podía haber llevado cualquiera de ellos pero me decanté por estos dos soldados. La ilustración, además de colorida, es muy chula. Es de las que gana en vivo.

Sketch de Grandes Preguntas, por Enrique Bonet

Hace unos días me avisaron de que había varios cómics dedicados en la Librería Joker de Bilbao. En cuanto tuve la oportunidad me pasé por allí. Estaba sobre todo interesado en el último trabajo de Alfonso Zapico, Carboneras. Nada más llegar al comercio me dirigí a la zona donde suelen colocar estos libros. Me llevé un pequeño chasco al descubrir que Alfonso solo había dedicado algunos ejemplares del primer tomo de La Balada del Norte. Un cómic que ya tengo. Seguí mirando. Encontré varios cómics de Mamen Moreu. También los tenía. Afortunadamente, había más material. Como Grandes Preguntas Que Se Contestan En Otros Sitios de Enrique Bonet. Abrí uno de ellos y vi que incluía una tarjeta con un sketch firmado muy del estilo Bruguera. Eché un ojo a las que quedaban y decidí quedarme con esta. Pero todas estaban tan bien como la que compré. Todavía había más cómics por descubrir. Pero eso lo dejamos para mañana.